Para ti

Hoy me desperté pensando en ti, y no digo que sea nuevo sentirte cerquita cuando abro mis ojos, o llenando cada uno de mis pensamientos…Digo, y afirmo, que fuiste lo primero en mi cabeza, y lo primero que sentí en mi corazón. Te das a ti misma toda la importancia a diario, y yo por mi parte no logro escatimar una mínima emoción, todas se reúnen a diario con la finalidad de pertenecerte a ti, y sólo a ti. Jamás me he preguntado las razones para que esto ocurra, o bueno, quizás no necesite ninguna para amarte un poquito más cada día, sin darle permiso, sin quererlo, sin pedir argumento alguno, es algo que simplemente ocurre y que se va apilando…Es como si se formara un muro, uno grande, tan inmenso como mis sentimientos hacia ti, un muro para protegerte a ti en caso – uno hipotético – de que estuvieras aquí.
No sé qué pensar de mí, y de ti, quizás no quiero pensar nada, quizás sólo quiero sentir, sentir hasta darme por completo al idealismo de compartir contigo mi vida y cada pequeño instante en ella.

Surge tu sonrisa como una imagen tan nítida como el último momento en el que pude disfrutar de ella, y aún cuando duele percibirla, me sonrío al tiempo que la veo, porque sé que existe y porque sé lo que causa en mí cuando aparece de la nada, comprometiéndose enteramente con un pensamiento propio que te regalo a diario: Ése que grita en silencio el mar de amores que por ti se forma con el rocío de las madrugadas y con la humedad de las noches.
Todo ocurre bajo el nombre de una calma imprecisa y adorable, te presentas así como te vas, dejando atrás la necesidad de estar contigo y la impaciencia por lograrlo. Y, dejas aquí la sensación de haberte tenido por un momento, despertando así un poco de felicidad, que aunque ausente siempre, lloviznas de sonrisas me regala mientras te pienso.

Una palabra no es suficiente cuando una mirada puede significar mucho más…la sinceridad de mis sentimientos están en la palabra no escrita, dibujada en el extremo de los secretos que se descubren fácilmente al mirarte a ti. Ojalá pudiera amarte, y no por no hacerlo ahora surge esa plegaria, sino por la facilidad de decírtelo con las ganas, el empeño y la seguridad de que me regales la plenitud con la gracia de corresponderme.

Cómo quisiera abrigarte en las noches más que con mis brazos, con este amor tan grande que guardo…Cómo quisiera reír ante la presencia de un roce de tus labios en los míos…Cómo quisiera llorar en tus abrazos…Cómo quisiera vivir en tu amor, ser testigo fiel de tu respiración y dueña admirable de tu mirada…

Sueño con estar contigo…y mi sueño eres tú. No hay nada más que el compromiso fiel de querer amarte por el resto de mi vida…Por eso, para ti, son mis pensamientos, mi entrega, y mi más ferviente y dedicado amor.

Llegaste para quedarte, y qué puedo hacer mas que esperarte?

“Falling in love is to love the coincidences. Loving is to love the differences”