Acaso,...acaso no me veías reír?
No veías mis esfuerzos por estar contigo? Acaso no eran suficientes? Acaso no te alcanzaba que mi lucha se enfocara en hacerte feliz...en darte lo que pensaba que merecías...no sólo lo que querías.
Acaso me faltó besarte más? Abrazarte más? Escucharte más? O, quizás, soñar-te más?
Eras el abrigo de mi noche, la luz de mis mañanas, el sustento de mi alma, la fuerza de mis ganas.
La vida en mis ojos, el brillo de mi sonrisa, mi única compañera,...mi más preciada amiga.
Todo te lo llevaste, mi vida, mi alma, mi corazón,...ya ni mi cuerpo corresponde a mi razón,...
Todo te lo llevaste -amor mío-...todo, y el mundo ahora es un lugar sombrío.
Acaso no me veías reír? Acaso...
(Que lleguen los recuerdos, las memorias, las reminiscencias,...y estas eternas horas. Pues recuerdo nuestro último aniversario, tu sonrisa y mi regalo, tu regalo y la brisa...Recuerdo nuestras fechas juntas, nuestros deseos, nuestras tantas risas).
En tu mano mi corazón, en tu dedo mi compromiso...y cada nuevo día 19, en mi alma el fatal final de mi paraíso.
Recuerdo nuestro último aniversario,...y tus mentiras,...y tu juego. Recuerdo claramente mil palabras, y por qué muere mi vida lentamente a manos del más abrasador fuego.
Un amor consumido en un solo minuto, en un solo acto...porque, si acaso, no creíste cuando te dije que si faltabas este ser caería en el fracaso.

Acaso tú...no me veías reír?