Estoy demasiado rota.
Demasiado inundada,...ahogada, desesperada,...
Impulso de llorar tan agónico como mi despertar...despertar tan vacío como cada noche, cada cama, cada sábana, cada sueño con ella y sin ella despertar,...
Tan rota,...tan sola,...casi maldita,...inercia.
Pies que se arrastran...gusano moribundo,...parásito del tiempo,...vida robada. Ente flotante en éter...y aún, medio viva.
Estoy demasiado rota,...demasiado viva,...demasiado muerta.
Sentirla como el aire,...como un sueño,...como ese suspiro último que se escapa cuando estás a punto de dormir,...como el cosquilleo en el vientre en el vaivén de un columpio,...como la suavidad de la arena del mar en los pies,...como la brisa, el calor, el agua, la lluvia, el frío,...como el todo,...como la vida misma,...como ese escalofrío que te da cuando tenés la muerte a los pies de tu cama,...como esa sensación de locura cuando te das cuenta de que hay que vivir otro día,...uno igual, una repetición, una copia, una maldita copia del día anterior. Sentirla tanto como se siente la nada,...sí, la nada. Ese vacío, ese negro que sólo vos ves, ese reflejo que no reconocés,...esa nada, tan triste, tan sola, tan simple...tan fría...tan...tan nada.
Sentirla...sí, sentirla...como la sangre en las venas, la electricidad en el pecho, el tacto en la piel...sentirla sin vivirla...vivirla sin sentirla...y soñarla. Tenerla en los labios besando tu vida y despertarte entre una sonrisa y una lágrima. Sentirla tanto que tu vida es agua, y el agua es mar...y sos vos llorando, y no hay nada más.
Cómo dejo de querer lo que empecé a querer sin querer...
Cómo olvido la memoria de una sonrisa...la belleza de una mirada...
Cómo caí en el abismo de este "no tenerla" para aún amarla...
Cómo...pregunto...se dibuja en mi rostro la esperanza de vivir, si el fuego de mi alma se apagó con su partida...
Cómo, cómo preparo la soledad a aferrarse a quien no busca estar sola...Cómo me acostumbro a que romperse es permanente...y que ella fue tan sutil y efímera como el agua en una fuente.
Recuerdo que solía dormir de la única forma en la que no podía abrazarla...debía bastarme que en el vacío del sueño mis pupilas y las de ellas se encontraran...debía bastarme con saber que al despertar ella sería lo primero que encontrase mi vista...Su boca, su olor, su cabello, esos giros atiborrados y revueltos que se desprendían de su cabeza...y que siempre hablaban de lo tranquilo o lo difícil de su día...
Dormía tranquila...su respiración era pausada, tibia...movimientos lentos acompañaban sus posiciones...y en algún momento...despertaba por unos cuantos segundos, para sonreír, para dar un beso...o tres...nariz, boca, mentón...boca, nariz...y de nuevo hacia abajo. Amaba ver sus ojos, dormida o despierta...se escondían un poco...pero sobresalía la luz de ellos, un buen haz de la más clara luz emergía de ellos...y cuando los abría...tibio y cómodo café miel...pestañas saludando al Sol...y cómo me miraba...cómo solía mirarme...y sacarme el alma de adentro con una tímida sonrisa...esa de despertar...esa de ver-me...
No necesitaba abrazarla de noche para gastarme en amor por ella...sólo necesitaba saber que ahí estaba...y que en algún momento en la inconsciencia, mi mano buscaría la suya,...o quizás viceversa...y nos encontraríamos en la misma, exacta condición..."morir-vivir por ella"

¿Cuánto más tengo que llorar? ¿Cuánto insomnio más a tu nombre? ¿Cuánto para que se desate este nudo? ¿Cuántas lágrimas?...
Estoy cansada. Cansada.
Te entregué todo y no me devolviste nada...manos vacías...noches vacías, alma vacía...
Tanta sal quema...y estoy cansada, y el dolor no cesa...y estoy cansada...cansada...sólo eso...cansada.
Gracias por lastimarme,...no me hiciste más fuerte.
Gracias por engañarme,...no me hiciste más inteligente.
Gracias por dejarme,...no quedé en mejores compañías.
Gracias por abandonarme,...jamás vino alguien en mi ayuda.
Gracias por culparme,...jamás alguien creyó en mi palabra.
Gracias por hundirme,...
Bastabas tú para entender que de mí nada vale, nada es bueno,...
Gracias,...porque por ti, todo apesta.
Que no puedo dañar si me dañan,...
Que si no soy un monstruo me convierto en uno después de luchar cara a cara con otro,...
Que si hay un hijo de puta, debe ser sólo uno, no convertirse en uno más,...
Que si ella vuelve debo perdonar, pero si yo vuelvo no te perdonan,...
Que cuando soy to es destiempo, y cuando es ella es justicia,...
Que no tengo derecho a pretender, pero ella pretende cada cosa,...
Que yo no, pero tú sí,...
Que si me dañan, trago...y si te daño, trago dos veces...
Que todo para ti, y nada para mí...
Que se repite la historia...en la que me dañan, y yo pago...en la que me defiendo, y pago,...en la que no importa si bien o mal, si defiendo o ataco, si amo o no, si muero o no...yo pago.
Siempre, pago,...
Las deudas se suman, los costos suben...y ya de mí no queda un ápice de fuego o de vida y libertad para pagar tanta inmundicia que he tenido que aguantar.
Que si eres una hija de puta yo no tengo derecho a serlo,...dimito a ser la buena,...renuncio a doblegarme,...y si odiar debo hacer, al odio voy a aferrarme.



El teléfono

Hoy no te había pensado. Confieso que reí hasta que todo en mí tembló, que me sentí deseada, querida,...confieso que corrí, sonreí, que mis pómulos están cansados, tanto como yo de estar feliz. Canté canciones que amo, hablé de temas oscuros que me hicieron sonrojar...tenté la soledad, las manos, la boca...
Y entonces llego a casa, me sacudo las ironías del día...doy unas cuantas vueltas, saludo al perro, hago una limonada,...busco a mi madre, no está...y en esta soledad, un solo reflejo me atiende...un número, tu número...y entonces...la impotencia.
Llega tu recuerdo,...tan frío...
Tan frío.
Me siento...miro al suelo, busco respuestas a preguntas que no existen...hablo como si estuvieses presente...te cuento mi día, mi vida...Llegas a mi cabeza, y luego, luego no te vas.
Todo te trae,...y no.
Todo me suena a ti,...y no.
Todo me clava tu sonrisa en los ojos,...y no.
Todo es una maraña de pasados inconclusos,...y no.
Todo es una pirámide,...un laberinto infinito de memorias,...y no.
Todo es insomnio, luto, delirio, cansancio, sueños, mares y el maldito dolor...
Sí.
Me afano a olvidar,...y más la recuerdo. Me afano a odiar, y más la quiero...
Me afano...corro, huyo...sin descanso...sin meta...yo sólo corro...
Correr bajo la lluvia, mojarse los sentidos, llorar, gritar, patear charcos, saltar hasta dolerse las rodillas,...
Cabeza en las manos,...y una caída...doblegarse ante el recuerdo, porque la lluvia no borra,...y el deseo de olvidar tampoco.
La lluvia es como la sangre...no necesariamente porque caiga, algo se está perdiendo.


"Ojalá no hayas cometido una locura"
Locura suficiente es amar a quien no existe, y extrañar a quien nunca existió...Yo busco matar el dolor, no la vida...si la segunda se va con el primero...de seguro no había mucho por o qué respirar.
Estás? Viniste? Estás aquí?
Si sí...feliz día del abogado...feliz día de tus esfuerzos -y de los míos- feliz día de esa meta...feliz día, te adelanto...
Hay cosas que duelen más que escuchar un "no quiero estar contigo"..."no voy a estar contigo"...
Mientras tanto...feliz día...
Y,...
Si me permito odiarte? Si me permito pasar por encima tuyo? Si te imagino mintiendo, si te imagino en una cama ajena...si te imagino inventando excusas...
Si finalmente puedo sentir rabia? Celos?...Y si por fin puedo estar en el marco en el que tú te revuelcas en cama ajena mientras yo me sudo lo nuestro?
Y si puedo finalmente herir el amor que te tengo, con el desamor que me tuviste?
Primer paso...odiar.
No perdonar.

5...no?

Estás ahí? Estás?...Y pregunto de nuevo, estás?
Recuerdo haberte encontrado siendo una niña,...bendición de mi verano, flor de mi invierno,...cálida sonrisa y palabra para el alma inquieta y lastimada,...estás?
Ojos pequeños, manos alegres,...uno, dos, y tres,...juegos alegres y mirada inocente,...estás?
Aire tranquilo, veleta en juego,...juegos artificiales de besos, canciones y mil versos,...estás?
Corazón tranquilo, esencia radiante,...calma que mueve, gran amor redundante,...estás?
Está, acaso, el ser inquieto, firme, suave,...la infante,...pájaros, estrellas, globos y lunas,...cocodrilo azul y petirrojo,...estás? Espíritu bondadoso...estás?
Está la niña que corre, juega, salta, ríe, besa, escucha y reza? Está la niña que vive, ama, escribe y acompaña?...Está la canción? Pregunto,...está la canción?
Está el abrazo? El beso? La caricia...o acaso el buen silencio?
No estás...respondo yo misma en un silencio que no inspira...como tú. Musa infame,...ser cobarde.
Está la culpa, el reproche y el olvido, está de ti todo, menos lo que ansío,...No estás, ya no,...no tú. Amo un infinito paralelo que olvidaste en el juego,...amo la revolución de las palabras,...del silencio, amo la risa, y tus ojos, eternos compañeros. Amo lo que fue y no es, lo que olvidaste,...amo a la mujer más allá del lenguaje...ojos pequeños, aire tranquilo,...petirrojo triste e incomprendido...
No estás...dice el eco,...
Y mientras tanto...tú recuerdas mi infierno,...y mientras tanto, yo, tu cielo,...y...mientras tanto, no hay un purgatorio...no un limbo, sólo yo queriendo lo que de ti se ha ido...
Pregunto,...estás? O no sos mas que el veneno que supura para hacerme olvidar y odiar, lo que no pude amar más.

A quién amo? Reflejo fortuito de lo que inventaste,...de lo que de ti olvidaste.
Y termina, diciendo el silencio,..."no, no lo lograste."




El café

"Se enfría el café", alguien dice...
Se enfría, se pone triste, se queda solo,...deja de humear.
Se enfría el café...
La ventana la trae de regreso,...
la voz de lo oscuro que llama,...
Las imágenes del mundo,...
Y alguien habla de un café.
Yo lo preparé, digo.
Creo que lo preparé.
Si se enfría es porque lo olvidé.
Se enfría el café, me pongo triste, me quedo sola.
Una fotografía se acerca a mis ojos...
Un sonrisa cercana me habita,...
si pienso en café pienso en su boca,...
Si pienso en su boca, pienso en la mía,
En la nuestra, en un beso,...¿Cuál café?
"El café que está servido"...alguien responde.
Hay un café en la mesa,...y se enfría,...
Hay una foto en mis ojos,...
La ventana, el café, la foto, los ojos,...
Preparé un café para que ella viniera.
El café está frío, y ella no vino.

Hablo con mi silencio,
Que en soledad me responde,...
"Se enfría el café, y ella no vino"
"Vení, sentate en la mesa, tomate el café conmigo"

19/06-2012

Dejemos de lado la poesía,...no escribo por nostalgia ni melancolía, por recordar, o por una maldita melodía,...escribo por todo aquello que siento todavía,...por extrañar y por querer, por amar y por temer,...por ese temblorcito que se manifiesta en la la madrugada, por la sonrisa y el llanto, por los silencios y quizás el canto,...por todo aquello que tú eras y nunca fuiste, por lo que yo fui porque tú estuviste.
Porque amo a quien no es, y extraño a quien no fue,...por el inmundo corazón, y de paso por el infierno y su calor,...escribo porque amo,...porque te amo y no eres, no estás y no serás,...por lo que fuiste y porque ya no estás. Escribo por las promesas, las tantas rotas en tu nombre, las que cumplo porque tú rompiste, y yo me niego a desechar,...
Escribo con rabia, con sueño, con ganas, con frío,...con una lágrima que se levanta y quema, con una sonrisa que ya no llega,...escribo porque me da la gana,...porque no estás, y no estarás mañana.
No es ni melancolía ni nostalgia ni devoción,...es porque vos te fuiste y aquí me quedé yo.
Cinco años de sentir el asco atorado en la garganta,...de creerte hasta la más pequeña palabra,...un aplauso a tu fortuita promesa,...esa, que tanto te mantuvo en mi mesa. Por la que te toca ahora, por la que te mueve, por la que te llena...y no,...por la que te mueve, y no,...por el maldito reemplazo que no te sigue el paso, que te llena la cabeza, pero del corazón, ni el medio vaso.
Una venia a los cinco años,...y de paso, a los daños.
Salud por el amor...y por todo lo que de eso, no sabés vos.

Día del escritor

Llegó a mí embebida en letras,...buscando un retoño propio entre palabras que le llovían. Cuán hermosas palabras, y ella buscándome a mí...cuán hermosa ella...y aún, buscándome.
Cada verso nos acercó, cada lágrima que derramé en mis libros,...un micrófono y unas cuantas miradas,...y su presencia en aquella banca, no de parque, no de plaza...sentada, y yo perdida...mi mundo y mis cosas, mis cosas y mi vida, mi vida y su ausencia que se haría sentir, vivir,...doler.
Era escritora, así como es ella ahora. Ella danza entre letras que no buscan reconocer-se...y yo entre ilusiones inventadas que no alcanzan.
Tocar, morder, herir, sanar, jugar,...nada alcanza. Como arena, se desliza cada palabra entre mis dedos,...es inservible el momento frente a una ausencia que no inspira, sino que mata. Ha muerto mi musa,...así como he muerto yo, mis tantas vidas, mis tantos poemas...
Hoy no hay en mí mucho qué celebrar...escritora de desamores era...y finalmente soy yo ese poema...ese triste, ese de mierda, ese a medias, ese cualquiera.
Cualquier palabra que haya escrito del dolor y su condena, es ahora mi maldita pena. Delirio de muerte, hazaña de vida,...ella es la gran musa y la letra prohibida.

Si me ven caer, no me levanten,...debo aprender a amar la sangre y las cicatrices,...las de ella y las mías, las de las dos y las de un sin-nos. No me quieran despertar de una pesadilla, el horror de no tenerla debe perseguirme, por un tiempo, por un momento, por un pequeño infinito. No quiero que me acompañen,...la soledad es lo que ella dejó, y debo atarme a ella, como me até alguna vez al amor.
Si me ven en el suelo...déjenme ahí...rota, bebiendo mi propio mar, curándome en éter,...este amor me destruye, me ahoga y me mata,...pero así como hoy es mi perdición, recuerden que alguna vez fue mi única bendición.
Yo muero, y moriré mil veces más,...naufragaré y dejaré de nadar...y recordaré que alguna vez ella me mató, pero muchas veces también, me logró salvar.
Le aseguro mi señora,...que no la reconozco. Que las personas sí cambian, y que usted cambió tanto que ya ni su sonrisa se le parece a la de antes. Le confieso además, que no la amor a usted, sino a lo que pensé que era...a la mentira justificada que tanto se molestó en mostrar.
Le aseguro, señora mía -y no mía- si usted pudiera leer mi mente, hoy, como cada día, también lloraría conmigo.

Día uno, paso uno.

Sucia, latente,...la incómoda realidad que supura de las llagas...y esa fantasía tenue diluyéndose en rodillas cansadas, roídas, gastadas, inútiles...y rogar, pedir, suplicar, implorar, anhelar...Dios! Su risa, sus ojos -y lloro-...que vuelva el Sol, que sólo llueva para jugar, dormir, caminar, saltar, reír. Paso uno, día uno...el sinsentido del tiempo, de la arena azul que corre y no cesa...tratar de devolverla, tratar de mover el mundo a antojos súbitos de tenerla...recoger los granos, sumirlos en el pasado...y correr, correr tanto y tanto,...correr hasta alcanzarla...tomarla de la mano, del beso, de la espalda, de la vida...tomarla del alma, atarla guardarla,...no perderla,...no perderla...no perderla.
Tic-tac, tic-tac,...apuestas perdidas sobre ella, sobre mí...sobre nuestro ir y venir,...nuestro tiempo, nuestra vida, nuestras ganas,...y tantas, tantas tristezas...y tantas más alegrías...
Dividida y rota,...como la antigüedad perdida, con historias por contar, con futuros por llegar...y aún, inservible, aún melancólica e inútil...reducida al rincón, al espacio del tesoro no encontrado,...enmohecida y fría, reducida, destruida, raída, vencida, herida...
Paso uno, día uno...rastros de lo que fue y no será,...rastros de lo que es sin haber sido,...despojos de ayer chocando entre sí...fuerza infinita sobre mí. Aplasta realidad! Aplasta y golpea, exprime,...exprime...que ha de fluir cada gota de pequeño y gran amor, por cada poro y fibra de tiempo por correr, por cada célula y átomo que de mí he de perder,...por cada lágrima rota que ha de caer...
Exprime, que de ese mismo amor he de beber.

T. de T.A



Pieles

La agónica violencia con que penetraba su carne le invadía la mente, coloreándola con los calores poco ortodoxos desprendidos de la barrera misma del decoro.
Tal satisfacción le mordió el horizonte y la ató a las pupilas de quien le diluía el corazón en su carne, su saliva,...su pubis.
El éxtasis precedió a la sonrisa jardinera de inocente erotismo,...perderse en el tiempo le había significado una muerte placentera en vilo de sus sentidos y aun a costa de ellos. La sed, precio final de la cabalgata de cuerpos, y, en respuesta brotaba el delirio salado de sus poros, enfundándola en una fresca capa de mar que se ajustaba a sus centímetros, a sus dolores olvidados,...a ese nuevo cáncer penetrando en su piel.
"Yo me maté en esa curva
(dije señalando su sonrisa)."

- Julio Cortázar -

Tiempo de...

Lo que soy se rompe,...cualquier intento de estar cerca de ella se desvanece. Se fue hace demasiado tiempo, y yo sigo en los mismos zapatos, con la misma huella, y el mismo camino...temblando, en silencio.
Antes, el amor me impulsaba, un cohete al universo, una carrera vencida. Nunca había huido...nunca,...así que no sé lo que es correr, no sé lo que es escapar, no sé lo que es dejar ir.
No quise -y no quiero- estar lejos de ella,...pero su velocidad e ata a mi imposible paso que vacila y se pierde en el tiempo,...tiempo de dudas que abundan, que brotan del suelo como hormigas, roen, hieren, comen de mí,...matan. Siempre su amor me dio fortaleza, y me enseñó a creer en lo que un "nosotras" significaba.
Jamás quise cambiarla, mi alma luchó por lo que su ser buscaba, nos empantanamos juntas, nos arrastramos juntas,...cielo o infierno...en hielo o en fuego aún la amo...y quiero -lo imposible- salvarnos. La ignoro, siempre la ignoro...su ambivalencia, su dualidad, su des-amor...así como ignoraba la posibilidad de perderla...ahora ignoro la imposibilidad de tenerla...mientras me pierdo, mientras me ignoro...mientras dejo de ser...y dejando de ser la he perdido aún más...y lo siento...porque ya no soy yo...he dejado de ser,...y en sus ojos me he dejado de ver. Tanto luché por no perderla que me perdí yo...y tanto me he perdido que ahora es imposible encontrar-me-la-nos.
Lamento haberme perdido...lo lamento realmente.
Ella se fue, voló tan lejos de mí, que ya no hay distracciones de mi parte...ya no hay palabras que la traigan...ya no hay piedras para construir castillos...ya no hay un mutismo que la llame. Y aún no encuentro el amor suficiente para irme,...o la fuerza para no quebrarme...y han sido tres años difíciles, cuán difíciles han sido estos tres años...sin ti.
Mi amor debería alcanzar para alejarme,...para encontrarme,...para amar-me. Pero se queda sobre mis tobillos, supurando, envejeciendo,...un amor enfermo y escurridizo...aún loco y quebradizo...un amor para mirarla a través de la ventana,...ella riendo y yo ahogando lágrimas,...tiempo para quedarse, para esperar, para irse...y aún, tiempo para seguir -bajo la niebla- rota.

"Llueve en silencio, que esta lluvia es muda
y no hace ruido sino con sosiego.
El cielo duerme. Cuando el alma es viuda
de algo que ignora, el sentimiento es ciego.
Llueve. De mí (de este que soy) reniego..."

- Fernando Pessoa -
...Éramos infinitas...

30

Hoy cumplo treinta años,...me veo a mí misma, y a pesar de que no me reconozco, que he perdido casi todo,...surge el hecho de que me corresponde una vida que debo respirar, sangre que me llena, agua que represento, y un universo infinito de sentires que, aunque rechazo, me pertenecen. Cumplo treinta años, naufragada en una soledad que me abriga aún más que la noche tibia...tan rodeada de personas...y aun, tan sola.
Extraño la voz compañera, el calor del abrazo sincero, el gesto amable de los ojos, manos y boca de quien corresponda mi cariño,...extraño todo, mi vida, mi espíritu, mi fuerza,...porque esto no soy yo, no del todo...me extraño a mí misma a través del espejo...
Le pertenezco a la soledad, al dolor, a la lluvia de las 11:30 de la noche...esa que llegó a competir por el sabor del mar, de la vida, del amor, de la ausencia...el mar en mis ojos,...hoy que cumplo treinta.