(…)

El punzante acoso de la noche, con afán desesperado de acabarse, con el filo apuntándose a mi espalda,…maldito tiempo! Los minutos gastados y los segundos colgados,…todo persiguiendo, con la pretensión de desvanecer,…puntos suspensivos en escasez,…deleite de ojos viajeros que se nutren de ella y la sienten en vacíos. El aleteo íntimo y delicado de besos imaginados,…las palabras clavadas en la espina dorsal,…el olor a cadáver, característico de la realidad,…el tiempo roído, las hojas secas,…y una mano que se aventura a rozar una silueta tan irreal como las posibilidades…la ruleta ignorante de la indecisión,…el deseo de aferrarme. Las llagas que surgen de hologramas,…el tiempo haciendo el amor con las mentiras del destino…Todo a su favor, todo en mi contra…
El punzante acoso de la noche,…y la luna que termina, y su adiós, inevitable,…tanto como el mío,…tanto como el nunca…

Todo gastado…