Señuelo

Dueña del crepúsculo anaranjado que circunda la noche,…De ese sueño intruso de humedades ajenas,…Portadora fiel del cielo nocturno, de palabras íntegras pero no irrompibles.
Seductora perfecta de la mirada lunar,…cómplice de silencios y ausencias…
Lascivamente hermosa, caminante a oscuras,…Amante de la primavera pensante, de las múltiples artes,…de la sangre, el vino y el narcótico sabor de un cigarrillo.
Bella especie negra establecida sin reglas, sin morada, sin estancias ni estaciones…mariposa en solitaria flor, fotógrafa del color,…y tras ella la ternura desnuda, el néctar derramado y los tintes vegetales de amor.
Mundo abierto en ojos pardos, velo y transparencia, sabiduría que no rasga, rigidez que no toca,...y su certeza muda.
Es la calma en el caos…el tren de partida, la hora de llegada, el minuto faltante, el beso sobrante, la caricia iniciada, el tacto caminante. Es la sombra de mi árbol, la sonrisa no fingida, el alma sin recaudo y mil momentos de alegría…
Convicciones, deseos y caprichos,
Pasiones, cautelas y delirios…
Serena e impasible,…
Tiempo en fuga,…

Ella es todo, menos mía…